De visita por el Perú, el autor peruano
radicado en Francia participará en un conversatorio y en una mesa redonda sobre la memoria y los espacios ficcionales en la literatura
Desde hace algunas semanas se encuentra
entre nosotros el escritor, crítico y traductor peruano Félix Terrones quien
durante la reciente 20ª Feria Internacional del Libro de Lima presentó su
novela 'Ríos de ceniza' (Textual Pueblo Mágico, 2015). Para charlar sobre su
reciente novela, su labor como crítico, y sus actividades en Lima, discutimos
con él en el marco de la FIL. El resultado lo encontrará en la siguiente
entrevista.
-Félix has publicado varios títulos sin
embargo poco o nada sabemos de ti. Acércanos a tus historias, háblanos de
ellas…
- Sí, lo que ocurre es que vivo en
Francia desde hace más de una década y, la verdad, hasta ahora muy poco me he
preocupado de divulgar mi trabajo en el Perú, pese a que tres de mis cuatro
libros hayan aparecido aquí. Publiqué mi primer libro en el 2003. “A media luz”,
es el nombre de esta colección de novelas cortas publicada por la PUCP. El
libro salió al mercado con un tiraje de 500 ejemplares.
El año 2008 hice lo
propio con “El silencio de la memoria”, mi primera novela, bajo el sello Mundo
Ajeno, editorial independiente dirigida en aquel entonces por el escritor
Carlos Yushimito. El 2014 publiqué mi primer libro de microrrelatos “El viento
en tu cara”, en la ciudad de Granada, España, con la editorial Nazarí,
especializada en el género. Finalmente, y después de siete años por primera vez
publico mi novela “Ríos de ceniza”, bajo el sello Textual, quien también ha
publicado la edición conmemorativa de “El cazador ausente” de Alfredo Pita. A
mí me tocó coordinar dicha edición.
-Desde hace algunos años vives en Francia.
Además de escribir también te dedicas a la crítica, labor que te mantiene
informado acerca de todo lo que se produce en nuestro país. ¿Cómo mantienes el
vínculo?
-Además de la literatura, me dedicó a
la reflexión literaria lo cual me lleva a estar informado sobre todo lo que
escriben los autores, autoras peruanas y también los escritores
latinoamericanos. Seguí un doctorado en la Universidad de Burdeos-Francia y
ahora me dedico a trabajar para el Centro Nacional del Libro de Francia.
También realizo traducciones del francés al español actividad que me obliga a
estar atento a todo lo que ocurre con la literatura latinoamericana con el fin
de recomendar o traducir autores de esta parte del continente a diversas
editoriales en Europa.
Lo que pasa, para regresar a tu pregunta, es que al
final de mi doctorado quise ponerme al día en todo lo que correspondía a la
literatura latinoamericana. Descubrí que, si bien nunca podría hacerlo de
manera exaustiva, por lo menos sí podía detenerme en los autores más interesantes
así como también advertir las temáticas preponderantes, sin olvidar el mercado
editorial.
-Todo este trabajo sobre las
traducciones y recomendaciones a autores latinoamericanos incluye nuestro
franciscano universo literario peruano…
-En menor medida porque el Perú no
tiene o maneja un sistema editorial como el argentino o el mexicano donde hay
instituciones públicas que divulgan a los autores y apoyan traducciones a otros
idiomas. En cualquier caso, me interesa saber qué se publica y se trabaja en la
literatura peruana contemporánea razón por la cual me mantengo en permanente
contacto con varios autores.
-A propósito, ¿cuál es tu percepción
sobre lo producido últimamente en el campo literario peruano?
-Observo toda esta producción con mucho
entusiasmo pero también con ojos críticos ¿no?
-¿Cómo es lógico no?
-¡Claro!
-A propósito de tu labor como crítico y
autor. ¿Qué nos puedes decir al respecto?
-No me agrada el término de crítico
porque podría connotar una manera fría de tratar la literatura. Mi acercamiento
a la literatura es más bien por el lado del gusto, de la pasión, del cariño que
puedo tener ante ciertos libros. Mi objetivo es transmitir la experiencia
literaria que despierta en mí la lectura. De otro lado y como autor de “Ríos de
ceniza”, para darte como ejemplo mi última publicación, mi labor va más bien en
la elaboración de un universo, de darle forma novelesca a una idea, una
obsesión que tengo. Así no buscaré explicar algo sino más bien delinear sus
contornos mediante las palabras. Se trata de una recurrencia temática en mis
ficciones, para ser más exacto.
-Precisamente sobre “Ríos de ceniza”,
la historia de un joven latinoamericano en Francia, su búsqueda literaria, el
amor, entre otros temas… Podrías ahondarnos más sobre el origen de este libro.
-Es una novela que empecé a escribir
hacia el 2007. Incluso mucho antes si tomamos en cuenta las notas que siempre
tomo. Sin embargo, la conciencia de escribirla, de saber que lo que tenía entre
manos tomaba forma de novela, vino después. No sabría decirte exactamante
cuando. La terminé en el 2012. Después la dejé descansando para posteriormente
rescatarla y darle los toques finales. La idea original era contar cómo uno se
convierte en escritor. Ese trayecto que lleva a un individuo a madurar su
vocación de ser un literato. Me di cuenta que la historia debía contrastarse
con otros eventos para evitar lo lineal en el camino del descubrimiento y
evolución de un individuo y hablamos también de los encuentros amorosos,
profesionales...
-Y obviamente en la historia también
incluiste tus lecturas…
-¡Por supuesto! De hecho, es una novela
que tiene gran parte de recuerdos, propios y ajenos, pero sobre todo tiene
muchas de mis lecturas. En este libro hay un homenaje al gran poeta alemán Paul
Celan, por ejemplo. Como lo descubrirá el lector, lo mismo que el narrador,
Paul Celan también vivió en Tours. Entonces, el narrador de mi novela se
interesa en el poeta y sus escritos, quiere descubrirlo pues siente que hay
algo, más allá de la ciudad, que lo conecta con él. También hay guiños a El
lirio del valle de Honoré de Balzac y En busca del tiempo perdido de Marcel
Proust. Es un libro vital y libresco al mismo tiempo. Todos estos elementos se
fueron macerando a lo largo de los años para finalmente llegar a “Ríos de
ceniza”.
-Abordando un poco la historia del
protagonista de la novela. A determinados autores les aterra la idea de asociar
sus historias literarias con algunos aspectos de su vida. ¿Qué opinas al
respecto?
-La biografía alimenta la vocación del
autor. Eso es innegable. Lo cual no quiere decir que cuando el autor escribe en
primera persona esté hablando necesariamente de él. Cuando el autor empieza a
escribir o incluso cuando dice “yo cuento” ya está haciendo ficción. La ficción
supone la recreación de la realidad por medio de la palabra. En mi caso,
particularmente me desmarco del tema autobiográfico porque le quita poder a la
historia de ficción. ¿De qué sirve decir que el autor y el narrador son la
misma persona? Eso restringe mucho la fantasía. El escritor que escribe desde
el “yo” hace ficción y no autobiografía.
-Para terminar. La literatura peruana
contemporánea habla sobre historias intimistas, post conflicto, fantástica. ¿En
cuál de estas tendencias ubicamos a “Ríos de ceniza”?
-¡En ninguna! Si consideramos las
lecturas que me llevaron a “Ríos de ceniza”, considero que es una novela que
busca un panorama sustentado por lecturas no necesariamente peruanas sino más
bien europeas. Ahora bien, al haber escrito el libro y publicado en una
editorial nacional éste se inserta en la literatura peruana y justo en un
periodo singular en el que se habla de novela autobiográfica. Pero eso es un
accidente. Soy consciente que hay otras búsquedas formales y estéticas en mi
literatura, como autor y lector. Me interesa mucho la novela de la violencia,
por ejemplo.
-Sobre tus últimas lecturas a autores
peruanos y un poco apelando a la opinión del analista literario. ¿Cómo observas
las últimas producciones literarias locales?
-No voy a decir que la literatura
peruana pasa por un gran momento. Me parecen términos triunfalistas que son más
para el fútbol y la cocina pero no para la literatura local. Como te decía hace
un rato, terminé mi tesis doctoral en el 2011. Me encerré con cuatro novelas
latinoamericanas del Boom. Al final, me decidí a leer lo que se está haciendo
ahora. Te puedo decir que, cuando se trata de autores peruanos, me he llevado
con una buena sorpresa. Observo en el país un sin número de autores que están
explorando diversas temáticas, diversos ejes de manera comprometida y valiente,
en ocasiones de manera alternativa o paralela a lo impuesto por las modas
editoriales. Frente a toda esa “homogenización” de la literatura que exista una
heterogeneidad que corra de manera paralela es desde ya admirable.
Sobre Félix Terrones
Escritor, crítico y traductor peruano.
Doctor en estudios hispanoamericanos por la Université Michel de Montaigne –
Bordeaux III (Francia). Ha publicado las novelas cortas reunidas bajo el título
de “A media luz” (PUCP, 2003), la novela “El silencio de la memoria” (Mundo
ajeno, 2008) y el conjunto de microrrelatos “El viento en tu cara” (Nazarí,
2014). Editor y antologador de la obra de Sebastián Salazar Bondy para la
Biblioteca Ayacucho de Venezuela (2015). Ha traducido la novela Conquistadors
de Eric Vuillard, de próxima publicación en Ecuador. Colabora con diversos
medios europeos y americanos como “Le salón du livre” (Francia), Sub-urbano
(EEUU), El Hablador (Perú), entre otros. Vive y trabaja en la ciudad de Tours
(Francia).