martes, 1 de agosto de 2017

Nataly Villena: “El trabajo de escritura en un medio como el nuestro es un recorrido al filo de la navaja”


Autora de la antología “Como si no bastase ya ser”, 15 narradoras peruanas, título publicado por Grupo Editorial Peisa, presenta su libro la FIL-Lima 2017

Fotos: Rosana López Cubas


En el marco de las actividades de la 22ª Feria Internacional del Librode Lima, FIL-Lima 2017, se presenta la antología “Como si no bastase ya ser”, 15 narradoras peruanas (Grupo Editorial Peisa, 2017). En estos textos el lector podrá encontrar una singular mirada acerca de temas como la emancipación, la familia, la relación amorosa, la maternidad, el rol social, el viaje, la migración, el hecho cultural, la incomunicación, la venganza, el secreto. Participan las autoras: Katya Adaui Sicheri, Grecia Cáceres, María José Caro, Irma del Águila, Rossana Díaz Costa, Yeniva Fernández, Alina Gadea, Ofelia Huamanchumo de la Cuba, Susanne Noltenius, Karina Pacheco Medrano, Claudia Salazar Jiménez, Jennifer Thorndike, Claudia Ulloa Donoso, Gabriela Wiener, Julia Chávez.

Al respecto Lima en Escena charló con Nataly Villena, narradora, editora, ensayista y prologadora de aludida antología.


-Hola Nataly, empecemos nuestra charla con una inquietud.  El nombre de tu antología: “Como si no bastase ya ser”, que es al mismo tiempo un verso que se desprende de un poema de “Noches de adrenalina” de Carmen Ollé, no es casual. Aquí hay un tema de protesta, un grito ante la invisibilización de las autoras y por consiguiente de sus obras, ¿no?

-Hola Rosana, el título de esta antología es un verso de Carmen Ollé, de Noches de adrenalina, de ese libro que en su momento fue un cuestionamiento frontal a la condición de la mujer en la sociedad y sobre todo a la de la mujer que escribe. Esta crítica la hacemos quienes escribimos hoy porque estamos todavía confrontadas a esa invisibilización a la que haces referencia.

Esto, felizmente, está cambiando. Por un lado gracias al surgimiento de editoriales independientes (a partir del año 2000), que tuvo el efecto positivo de permitir la publicación de un grupo consecuente de escritoras. Y por otro gracias a la difusión y la crítica por medios alternativos, en particular Internet. Los canales tradicionales   de visibilización, como es habitual, tienen una reacción más tardía.

-¿Cuáles fueron tus políticas de selección tanto de las autoras como de los relatos?

-Seleccionamos autoras nacidas entre 1966 y 1986. En este lapso de dos décadas encontramos un grupo de escritoras con proyectos literarios bien definidos y con voces perfectamente distinguibles. Son, además, escritoras que traducen con inmediatez el sentir de una época, la que corresponde al cambio de siglo.
Los textos seleccionados tienen como hilo conductor temas comunes como la  emancipación, la familia, la relación amorosa, lo relacionado con el dominio íntimo, que es donde el cambio social se traduce (o no) de manera más genuina.

-Antes de esta antología se publicaron algunas más que agrupan a narradoras post generación ochentas y noventas. “Matadoras”, “Disidentes”. ¿Cuál o cuáles son las variantes que nos ofrece “Como si no bastase ya ser” con respecto a las antologías antes mencionadas?

-El trabajo de escritura en un medio como el nuestro es un recorrido al filo de la navaja. Una promesa en literatura puede consolidarse pero también desvanecerse con facilidad. “Matadoras” fue una antología importante para dar a conocer los rostros de las mujeres que escribían en aquel momento. Fue una instantánea de lo que podía ser en literatura escrita por mujeres más adelante.

“Disidentes” lo fue igualmente por ampliar el enfoque y dar espacio a más voces pero también a voces más afirmadas. Las escritoras debían tener ya un libro publicado. Ambas antologías sirvieron para reafirmar algunas vocaciones y consolidar otras frente al público lector.  “Como si no bastase ya ser” reúne a 15 escritoras con un proyecto ya confirmado, algunas de ellas presentes en los libros que has citado.

-El título nos presenta a un grupo “renovadorde narradoras. ¿Es innovador en tanto las estéticas de las escrituras de cada una de las autoras,  en tanto las diversas temáticas que abordan?

-La singularidad de estas escritoras radica en el tratamiento sumamente libre de ciertos temas que hasta hace algunos años respondían a un estereotipo determinado por nuestra situación social. Las relaciones de pareja, la familia, el rol social aparecían en la literatura fuertemente influenciados por ciertos paradigmas, uno de ellos era el rol subalterno de los personajes femeninos, su encierro al interior del hogar, su obligación de maternidad, por ejemplo. Ello ha ido cambiando lentamente a medida que la sociedad evoluciona, pero es visible de manera flagrante en estas escritoras. Tenemos así personajes femeninos que ya no se detienen en la sola reivindicación de su libertad sexual, hay además un cuestionamiento al papel que juega la economía en sus destinos individuales, una defensa de las aspiraciones de realización profesional, una mirada sobre su tiempo, menos idealización con respecto a la relación amorosa…

-Los relatos de nuestras autoras contemporáneas gozan de una diversidad temática admirable. Unas apuestan por lo social o historias vinculadas al periodo de la guerra interna o postguerra interna, lo fantástico, el yo. Háblanos sobre la cartografía temática de esta antología en particular.

-Este libro reúne, efectivamente, a escritoras con voces diversas. En la mayor parte de los casos tenemos textos de corte realista, con sus variantes. Además de los temas ya mencionados encontramos otros como la incomunicación, la migración, el hecho cultural, la búsqueda de independencia, el viaje. En cuanto al género, hay una exploración del terreno fantástico en el caso de Yeniva Fernández y elementos de lo gótico en el trabajo de Julia Chávez.

-Con respecto a sus escrituras. ¿Cuáles son sus búsquedas más recurrentes?

-El espacio ganado por estas escritoras es también la oportunidad para acceder a sensibilidades que percibimos sobre todo en tratamiento de los temas: Claudia Ulloa y Katya Adaui con una prosa breve y fuertemente cargada de simbolismo y poesía; María José Caro y Rossana Díaz con textos en primera persona, personajes que migran y una mirada al pasado impregnada de nostalgia; Alina Gadea con su exploración del espacio y el confinamiento; Susanne Noltenius y su mirada crítica al peso de las obligaciones sociales, al igual que Ofelia Huamanchumo, pero ella más bien en clave irónica y Grecia Cáceres, a través de la transgresión de las normas sociales y los efectos que desencadena. Luego Irma del Aguila y Karina Pacheco, con sus personajes confrontados a lo escondido y a la vez fuertemente conectados con la naturaleza; Claudia Salazar y su crítica a las instituciones; Jennifer Thorndike explorando los confines psicológicos de la dependencia. También está Gabriela Wiener cuestionando directamente los roles sociales que asignamos por la biología. La motivación de estas escritoras es, creo, la misma de cualquier otro escritor: la urgencia por tener algo que decir sobre nuestro tiempo y nuestra sociedad; la búsqueda de poder de ser oídas y leídas; hacer literatura.

-Finalmente Nataly, ¿cómo observas el desarrollo de la narrativa local producida por nuestras autoras?

-Observo un gran cambio, nueva sensibilidad, temas poco desarrollados por otros autores.

Sobre la autora


Nataly Villena Vega (Cusco, 1975). Es narradora, editora y ensayista. Tiene un doctorado en Literatura Comparada por Universidad de La Sorbona. Ha publicado la novela Azul (2005) y el ensayo Vargas Llosa, intellectuel cosmopolite (2008). Cuentos suyos han sido incluidos en las antologías Cuentos bricheros (2007), Matadoras (2008), Disidentes 1. Antología de nuevas narradoras (2011), Al fin de la batalla (2014). Ha coordinado talleres literarios a distancia para la escuela española «Fuentetaja» y ha formado parte del equipo de redacción de las revistas Literaturas.com y Ángeles y Demonios. Ha sido adjunta a la dirección en la editorial francesa L’Herne. Actualmente es directora de Las Críticas, revista virtual de crítica literaria hecha por mujeres.

Presentación
Comentarios a cargo de: Alonso Rabí y Nataly Villena