Actriz de trayectoria Ana Cecilia Natteri nos recrea una interpretación de lujo en La mujer espada. Luisa, su personaje, es la madre de Miguel, la suegra de Ana, amiga de Antonio y abuela de un bebé que llega a la familia de manera sorpresiva. ¿Desea saber sus apreciaciones al respecto? Allí va¿Realmente una madre "especial", totalmente identificada con el personaje?
¿Te parece?
Luisa es una madre y una suegra “pituca”, antipática, ¿se desdobló de manera impresionante?
¡Si un personaje horroroso! (risas) Efectivamente, trato de proyectar la compleja relación entre la nuera y la suegra, complicada muchas veces ya que las madres siempre pensamos que nuestros hijos son lo máximo y todo los que se ve cerca de ellos, no vale la pena, nunca le llega al talón, eso es un poco la mentalidad de la madre en general, es nuestra mentalidad.
¿Sí?
¡Por supuesto! Soy mamá, abuela y tengo yerno, pero bueno (risas)
¿Se involucró fácilmente con el personaje?
En gran parte de la obra si, en las escenas cortas me resultó un poco difícil.
¿Qué le parece La mujer espada?
La obra me gusta muchísimo. Desde que Mariana me entregó el texto me involucré en la historia que dicho sea de paso no dista mucho de nuestra realidad.
¿Urde la crisis post parto?
¡Claro! Es la temática de las mujeres que dan a luz y se sienten deprimidas, se sienten horribles. Si bien es un tema cotidiano, en términos artísticos, no se escribe mucho al respecto y La mujer espada, aborda este tema lo cual la hace una obra diferente.
¿Existe una tendencia a juzgarlas pero no a entenderlas?
¡Exacto! Pese a vivir en un mundo “moderno”, muchas veces no se entiende a las madres que adolecen del trauma post parto.
¿Qué lecciones le deja La mujer espada?
Aprender a ser más tolerantes, más comprensivos, aceptar la realidad que le toca vivir a las madres que tienen crisis post parto.
¿Tiene algún punto de cuestionamiento a la madre primeriza?
¡No, por favor! Las madres son como son…
La suegra, también tiene sus momentos de soledad, sus momentos de pleito con ella misma…
¡Totalmente! Acuérdate que el hijo se fue y eso es muy difícil, es su único hijo ¿no? Además debes tener en cuenta que ella es una madre abandonada.
¿Pese a sus obsesiones la suegra es también cómica?
¡Por supuesto! Particularmente tengo un poco ésa tendencia.
¿Del humor negro?
¡Sí! Muchas veces me aflora el humor negro. (Risas)
¿Te parece?
Luisa es una madre y una suegra “pituca”, antipática, ¿se desdobló de manera impresionante?
¡Si un personaje horroroso! (risas) Efectivamente, trato de proyectar la compleja relación entre la nuera y la suegra, complicada muchas veces ya que las madres siempre pensamos que nuestros hijos son lo máximo y todo los que se ve cerca de ellos, no vale la pena, nunca le llega al talón, eso es un poco la mentalidad de la madre en general, es nuestra mentalidad.
¿Sí?
¡Por supuesto! Soy mamá, abuela y tengo yerno, pero bueno (risas)
¿Se involucró fácilmente con el personaje?
En gran parte de la obra si, en las escenas cortas me resultó un poco difícil.
¿Qué le parece La mujer espada?
La obra me gusta muchísimo. Desde que Mariana me entregó el texto me involucré en la historia que dicho sea de paso no dista mucho de nuestra realidad.
¿Urde la crisis post parto?
¡Claro! Es la temática de las mujeres que dan a luz y se sienten deprimidas, se sienten horribles. Si bien es un tema cotidiano, en términos artísticos, no se escribe mucho al respecto y La mujer espada, aborda este tema lo cual la hace una obra diferente.
¿Existe una tendencia a juzgarlas pero no a entenderlas?
¡Exacto! Pese a vivir en un mundo “moderno”, muchas veces no se entiende a las madres que adolecen del trauma post parto.
¿Qué lecciones le deja La mujer espada?
Aprender a ser más tolerantes, más comprensivos, aceptar la realidad que le toca vivir a las madres que tienen crisis post parto.
¿Tiene algún punto de cuestionamiento a la madre primeriza?
¡No, por favor! Las madres son como son…
La suegra, también tiene sus momentos de soledad, sus momentos de pleito con ella misma…
¡Totalmente! Acuérdate que el hijo se fue y eso es muy difícil, es su único hijo ¿no? Además debes tener en cuenta que ella es una madre abandonada.
¿Pese a sus obsesiones la suegra es también cómica?
¡Por supuesto! Particularmente tengo un poco ésa tendencia.
¿Del humor negro?
¡Sí! Muchas veces me aflora el humor negro. (Risas)
