Este fin de semana se estrenó La señorita Julia, original de August Strindberg con las destacadas actuaciones de Fiorella de Ferrari, Camila Mac Lennan y Bruno Odar, bajo la dirección de Marian Gubbins. Una historia de amor que transcurre a fines del siglo XIX en donde los protagonistas son interpelados por su propia manera de enfrentar la vida, sus anhelos, la condición social que los separa, pero sobre todo por la consecuencia de sus actos y la crudeza de la vida cotidiana. Precisamente para reflexionar sobre este nuevo estreno del Teatro de la Plaza Isil, la directora Marian Gubbins accedió a nuestra entrevista. Allí va
¿Estamos ante una reposición?
¡Efectivamente! La señorita Julia se estrenó a inicios de la década de los ochentas y la dirigió Alfonso Santistevan, con Alberto Isola y la maravillosa actriz: Mari Ann Vargas. Cuando vi la obra me impactó razón por la cual la recordaba con mucho detenimiento.
¿Qué nos puede decir de la primera versión?
Particularmente a mi me encantó. Hace dos años vi la versión cinematográfica de origen inglesa y fue precisamente en ése momento que decidí trabajar La señorita Julia como mi siguiente montaje.
¿Qué le sedujo de La Señorita Julia?
Me gustó el tema. Me pareció interesante la historia que dicho sea de paso tiene cierto parecido con la coyuntura que vivimos en este momento ¿no?
¿Cuáles son las variantes de la versión actual?
Con respecto a una dramaturgia de corte histórica soy conservadora por obvias razones en la nueva versión he sido absolutamente fiel al texto, manteniendo el tiempo, el ritmo y por supuesto la escenografía.
¿Retoma la coyuntura histórica de la puesta en escena?
Si, por supuesto, La señorita Julia es un retorno a su época y los personajes responden a la gente que formó parte de ese período.
¿Estamos ante una apología al amor imposible?
Al amor imposible y a las dificultades que nosotros mismos creamos a la hora de establecer los patrones de conducta los cuales nos acaban jaqueando y cortando la posibilidad del amor.
¿Qué nos puede decir de la obra en su conjunto?
Es una obra compleja la cual nos lleva a reconocernos como personas muy complicadas.
¿Lo más destacado del montaje?
La obra nos permite examinarnos como personas, que los seres humanos tienen una multiplicidad de intereses y afectos muy cercana del vicio a la virtud.
Teatro La Plaza Isil: Larcomar - Miraflores
De jueves a domingo Del 16 al 31 de Mayo 2011.
