Hace unos días,
la poeta Mariella di Laura presentó su nuevo libro “Mirada de Ginebra”
(Paracaídas Editores), el cuarto poemario después de “Fiebre”, “Abismo”, y “Voy
por las huellas del delirio”. La mesa de presentación estuvo a cargo de los
escritores: Giovanna Pollarolo, Carlos López Degregori y Carmen Ollé.
"Con un lenguaje austero, seco y duro, Mirada de Ginebra, es un paso adelante en la propuesta poética de Mariella di Laura", dijo al respecto el poeta Carlos López Degregori. Precisamente, para saber más sobre la
autora, Lima en Escena charló con la poeta.
-Mariella,
antes de centrarnos en tu último poemario hablemos un poco de ti. ¿Cómo se da
tu vínculo con la poesía?
-A través
de los talleres de poesía. Primero me
recomendaron el taller de Ana María Gazzolo y después el de Carmen Ollé. Yo
tenía adentro el ansia de la poesía y me interesaba escribir poemas.
-¿Quiénes
son tus poetas de cabecera?
- Me
gustan Ana María Gazzolo, Carmen Ollé, Carlos López Degregori, Giovanna
Pollarolo.
-¿Por qué?
-Porque en la poesía de Gazzolo, por ejemplo, encuentro lirismo y una profunda soledad. Eso me atrae, mientras que en la de Carmen Ollé, arte para escribir.
-Te has
formado en los talleres de Ana María Gazzolo y Carmen Ollé. ¿Cómo nutrieron tu vena creativa ambas maestras?
-En el
taller de Ana María Gazzolo, fue su ternura y paciencia para leer mis poemas en
borrador. Aprendí que tenía que escribir de todas maneras. En el de Carmen Ollé, por las variadas lecturas que hacíamos juntas
y porque me orientó hacia la publicación.
-¿Cómo ha sido el camino de tu escritura post
talleres?
-Sigo
escribiendo y asistiendo a los talleres permanentemente con Carmen. Sola no
podría trabajar, me canso, me diluyo.
-¿De qué
manera nutres tu pluma?
-A través
de las lecturas de poetas de distintos países: hemos leído de todo en los
talleres, desde poesía china antigua, griega, surrealista, latinoamericana
contemporánea y sobre todo a poetas peruanos, hombres y mujeres del siglo XX y
XXI.
-Mirada de
Ginebra es tu último poemario después de tres. ¿Cuáles fueron los temas de
interés y de indagación poética de tus anteriores poemarios?
-Son los
mismos temas de mi poética: son temas oscuros relacionados con la muerte, con
la soledad, con la ira, con la rabia de vivir.
-¿Qué te
lleva a gestar Mirada de Ginebra?
-Mi propia
soledad.
-Desde tu
primer libro de poemas Fiebre, pasando por el segundo Abismo, y el penúltimo
Voy por las huellas del delirio. ¿Cómo crees que ha evolucionado tu lírica?
-Creo que
empiezo a ver la poesía como un proceso en el que es importante la corrección y
la paciencia, cosas que no tengo necesariamente pero que debo aprender a
manejar.
-Existe un
hilo conductor entre tus cuatro poemarios, la mirada inescrutable sobre temas como el amor, la soledad, la muerte, la amistad. ¿Por qué?
-Escribo
sobre el amor, la soledad y la muerte porque son sensaciones y sentimientos que
están unidos a mi vida. Creo que esos tres temas son los más importantes.