“En la
ciudad de Trujillo existe un importante trabajo y crecimiento del clown”, nos
dice en la presente entrevista una de nuestras más emblemáticas payasas
Foto: Rosana López Cubas
Este año Wendy
Ramos celebra 25 años como payasa. En el marco de esta celebración el 23 y 24
de junio se llevará a cabo dos funciones especiales de su primer unipersonal Cuerda.
La primera profondos Bolaroja, la asociación que dirige. Asimismo, el aludido y
exitoso espectáculo llegará por primera vez a las ciudades del Cusco y Trujillo.
Cabe
destacar que Cuerda es el primer unipersonal de Wendy Ramos estrenado en el
2013 en Lima de la mano de Los Productores y la dirección de Nishme Súmar.
Sobre este tema, Lima en Escena entrevistó a una de las artistas clown más representativa
del país.
-Antes de hablar sobre Cuerda, espectáculo que
llevarás a dos ciudades del país a propósito de tus 25 años como clown. ¿Sigue siendo un reto ser payasa en el medio local?
-¿En qué
sentido?
-Artísticamente. ¿Ser payasa es una especialidad
que fluye o se encuentran dificultades en el camino?
-No, nada es
fácil. Particularmente, sigo estudiando. Al año llevo entre tres a cuatro
talleres de clown porque el tema es inagotable. Somos inagotables. En cada
taller encuentro cosas de mi payasa que no sabía. Temas completamente nuevos.
Hay talleres en donde me va bien, otros en donde me va mal.
-¿Por qué te va mal?
-Porque mi
forma de llevarlo es distinto. Tengo un estilo el cual lo direcciono más a la
parte emocional. Asumir un nuevo taller es como estar detrás de la cortina y
aventarte al vacio.
-Ya que tocas el tema de tu estilo. ¿Qué define tu
estilo de payasa, de clown?
-Lo que
vengo trabajando desde hace un buen tiempo es una payasa, un clown que conmueva
y se para frente al público y diga: “esto es lo mejor que puedo hacer.” Mi foco
no está en la risa. No me burlo de nadie menos de mí. En los últimos seis años
tomé el camino relacionado con el tema emocional. Investigué sobre las
emociones de la payasa: ¿Qué le pasa cuando esta triste? ¿Qué le pasa cuando
tiene dificultades? ¿Qué le pasa
cuando está mal de amores? Me aboqué a toda la parte emotiva porque deseo saber cómo
reacciona el público pero sobre todo deseo saber qué pasa conmigo también…
-¿Por qué decides romper con la risa?
-Porque mi
interés no está en buscar la risa del público. Si bien soy una payasa y me
suceden episodios muchos de los cuales en el escenario conlleva a la risa, cuanto
empiezo a abrir más el juego empiezan a suceder otras experiencias en la vida
de esta payasa que maneja más la reflexión a partir de las emociones y la
experiencia de vida. Frente a este tipo de sensaciones el público tiende más a
la reflexión que a la risa fácil, y es precisamente lo que busco.
-Cuerda es tu primer y único espectáculo hasta
el momento. ¿Este unipersonal es autobiográfico?
-¡Sí,
claro! Habían algunas cosas graciosas en Cuerda que las quité porque no sentía
nada. Con esto no quiero decir que todo es verdad o todo es ciento por ciento ficciones.
Si digo que me he divorciado cinco veces es parte de la ficción y así…
-Cuerda inicia una gira por provincias. ¿Cuál es
tu relación con las otras ciudades fuera de Lima?
-En el
servicio de Facebook tengo una página oficial en la que interactúo con muchas
personas de diversos puntos del país. Muchos me escriben y les contesto. Me
escriben de Trujillo, de Cusco, y me piden que vaya. Llego el momento de ir a
estas ciudades y me da mucha alegría. Por mi iría a todos los lugares del país.
Deberíamos tener un teatro en todas las ciudades con una movida y desarrollo
cultural como debe ser. El teatro ha crecido en Lima. Se debe explotar este
momento. La calidad de las obras que se presentan y el nivel de los actores han
mejorado mucho. Antes con cincuenta espectadores uno pensaba que la sala estaba
llena y se conformaba. Ahora se agotan las entradas. Muchos teatreros antiguos incluso
se quedan sorprendidos.
-¿A nivel dramatúrgico a qué apunta Cuerda?
-A todas
las cosas a las cuales nos aferramos. A todo aquello que nos da seguridad. Al
marido, a los hijos, al pasado. Temas que te atan y no puedes avanzar porque
estas amarrada a ese vacío. Es difícil pero sigo hablando sobre estos vacios
que no se llenan con nada.
-¿Cómo resolver estos vacíos?
-Soltándonos.
Suéltate de esas cosas a las cuales estas amarrada. Todo este rollo es una oda
a la libertad, a despertarte a ese miedo que da la libertad también.
-¿Ya perdiste ese miedo?
-¡Nunca se
pierde el miedo…!
-Hoy por hoy, ¿te sientes libre?
-Gracias a
mi payasa he logrado sentirme libre. De saber quién soy, de conocerme, de no
tener miedo, de aceptarme como soy, con
lo bueno, lo malo, lo lindo y lo feo.
-25 años como payasa. ¿Cómo observas el trabajo
de los clowns en nuestro país?
-Esta
avanzado significativamente. Cuando empecé figuraba Pataclaún y no había nada más.
Posteriormente surgió Bola Roja y empezamos a formar gente por ambos frentes
con diferentes estilos. Después saqué a los chicos a trabajar en los hospitales,
asilos, orfanatos y en las calles. Algunos chicos que se iniciaron en Bola Roja
crearon sus propios proyectos algunos de los cuales son interesantes. En la
ciudad de Trujillo existe un importante trabajo y crecimiento del clown.
-Desde los ochentas o noventas, periodo de la
guerra interna, el teatro ha cambiado significativamente. ¿Qué percepción
tienes al respecto?
-Claro,
durante ese periodo estaba en Pataclaún. En ese momento July Naters se arriesgó
y decidió hablar sobre este tema. Así surgió “Pataclaún en la ciudad”. Recuerdo
que antes de estrenar capturaron a Maritza Garrido-Lecca. En ese momento cualquiera
podía ser un sospechoso incluso nosotros. Cuando se estrenó la obra el público
respondió y se rio de aspectos que le dolían… ¡Fue un momento duro…!
Sobre Wendy
Ramos
Se inició
en el clown como una de las fundadoras del grupo Pataclaún. En el 2001 creó la
Asociación Bolaroja, iniciando así un nuevo camino que integraba el clown a una
corriente de transformación social mayor. Después de cinco montajes teatrales
con Pataclaún en los noventas, volvió al teatro como actriz en La Tía de Carlos
(2010) para luego estrenar Doña Desastre, dirigida por Nishme Súmar en el 2011.
A estas
dos obras le siguieron las exitosas comedias dirigidas por Juan Carlos Fisher
TOC*TOC y El Apagón. Luego de actuar en su primer largometraje, Asu Mare,
participó en A los 40, cinta dirigida por Bruno Ascenzo. Cuerda es su primer
unipersonal estrenado en el 2013.
Asimismo,
Cuerda se presentará este 23 y 24 de junio en el Teatro Pirandello (Av. Petit
Thouars cdra. 10, Santa Beatriz) en dos únicas funciones a las 8:30 pm. Las
entradas se encuentran a la venta en los módulos de Teleticket y en la
boletería de teatro. Las entradas para las funciones de Cusco el 03, 04 y 05 de
julio se pueden adquirir mediante PAPAYAPASS y para las funciones de
Trujillo el 25 y 26 de julio en Teleticket.