El teatro es una herramienta de conocimiento y de comprensión para entender la vida y a mí mismo
Lleva toda una vida dedicada al teatro. Toda “Una vida en el Teatro”, como casualmente se llama la puesta en escena, original de David Mamet que hace unos días estrenó bajo su dirección en el Teatro de la PUCP, con las actuaciones del maestro Alberto Isola y Renzo Schuller. De otro lado, tiene más de 15 años al frente del Centro Cultural de la PUCP, en una auspiciosa gestión que promueve y alienta el arte local e internacional, amén de organizar y llevar adelante, el cotizado e internacional Festival de Cine de Lima que éste 2011 promete un atractivo programa. En esta ocasión, Lima en escena charla con Edgar Saba, quien nos entrega una amena entrevista salpicada de memorables recuerdos de su amistad con el Cardenal Augusto Vargas Alzamora, Carlos Saura, Geraldine Chaplin, además de darnos sus puntos de vista en torno al panorama electorero que vive el país.
Una vida en el teatro
-Una vida en el teatro, ¿refleja casualmente su vida: dedicada al teatro?
-Muy interesante tu reflexión. ¡El teatro es precisamente la vida! Nada está hecho hasta que hacemos todo índole de cosas. Por lo tanto, la obra no se ha estrenado, el estreno se da en cada función. Una vida en el teatro, es un homenaje del teatro a la creación en general.
-Estamos ante una puesta en escena divertida…
-Se trata de una comedia divertida, hilarante y el público puede ver todo lo que pasa realmente en el teatro y las actuaciones de Alberto y Renzo son excepcionales.
-¿Se percibe también los problemas típicos de los actores en un escenario?
-¡Lógico! La obra te plantea la problemática que tienen los actores, los creadores, por falta de apoyo; es realmente una historia conmovedora.
-¿Hay una lucha generacional también?
-Si, como es lógico, la lucha entre la joven generación que “todo lo puede” y una generación mayor cuya carta de presentación es la experiencia.
-¿Cuál es la parte medular de la obra?
-Que una generación no puede vivir sin la otra. En “Una vida en el Teatro”, David Mamet hace un juego entre la ficción y la vida.
-¿Por qué el teatro va de la mano de nuestro entorno social, personal…?
-Porque teatro es vida. Para mí, el teatro es una herramienta de conocimiento y de comprensión para entender la vida y a mí mismo. Cuando hice La muerte de un viajante, la hice para encontrar respuesta a las relaciones y conflictos familiares que viví en ése entonces y se la dediqué a mi hijo con quien tenía problemas. La obra me ayudó mucho a entender este conflicto.
Recuerdos del Cardenal Augusto Vargas Alzamora
-Usted es un promotor cultural inagotable, lo observo desde la última entrevista que le hice hace más de 15 años
-¡Qué tiempos! Durante la inauguración del Centro Cultural de la PUCP…
-¡Sí!
- Permíteme contarte una anécdota de aquel entonces.
-¡Cuéntenos!
-Cuando inaugurábamos el Centro Cultural de la PUCP, el rector Hugo Saravia, estaba tan asustado con el tema de las reglas protocolares y mi papel como anfitrión durante el saludo de bienvenida al Cardenal. No paraba de decirme que había que besar la mano al Cardenal en signo de saludo y sentí tanta presión en ése momento que estaba empapado en sudor (risas).
- Se refiere al Cardenal Augusto Vargas Alzamora, ¿no?
-¡Sí! El entrañable Augusto a quien lo conocí en el Colegio de los Jesuitas. Fue mi profesor, padre espiritual y amigo durante mi etapa escolar y lo dejé de ver todo el tiempo que estuve en España, alrededor de 20 años.
-En esa ocasión se vieron después de 20 largos años…
-¡Sí! Cuando llegó el Cardenal Augusto al Centro Cultural, fue él quien -imagino emocionado por verme después de tanto tiempo- se acercó para saludarme y le recordé que le decíamos “cabezón”, en tono de “palomillada” (risas).
¿Le dijo eso?
¡Sí! Precisamente cuando se me acerca para saludarme y nos abrazamos aproveché para decirle en el oído: ¿no sé cómo llamarte? “Te digo: Augusto, Monseñor o cabezón” (risas).
¿En tono de broma por supuesto?
¡Claro!
-¿Qué le dijo?
Me murmuro en el oído diciéndome: “dime Augusto o Monseñor pero olvídate lo de cabezón” (risas).
-¡Qué buenos recuerdos aquellos! ¿No?
-¡Recuerdos inolvidables! El rector de la PUCP no sabía que el Cardenal había sido mi profesor, mi consejero espiritual y que además en el Colegio le decíamos “cabezón” (risas).
-El Cardenal Augusto Vargas Alzamora fue una personalidad de nuestra iglesia en aquel entonces…
¡Por supuesto! ¡Extraordinario! De una amplitud de espíritu y poseedor de una ternura admirable (silencio).
-Hoy, se ha perdido la ternura y si hablamos del país ya no existe…
-El país ha perdido ternura y en estos momentos más aún. A propósito de éste tema, durante la campaña anterior, PPK fue tal vez el único candidato a la presidencia que a través de su sentido del humor logro trasmitir ternura en su momento. Para mí la grandeza y la ternura son elementos básicos de toda persona. La grandeza para comprender al otro y la ternura para ponerse en los zapatos del otro.
-Difícilmente las personas se ponen en el zapato de su interlocutor
- Ponerse en los zapatos del otro, es la función fundamental del arte y de las relaciones humanas. En la tragedia griega, cuando se toca el tema de la catarsis, se habla de ponerse en los zapatos del otro actor de la tragedia, de sentir compasión y la compasión es el sentimiento más elevado del ser humano.
¡No votaré por Humala!
-El ámbito político actual no goza de elementos como la humanidad, la grandeza, la ternura…
-¡Lamentablemente no! En el tema de la política y en cualquier otro campo, las personas dialogan, se ponen de acuerdo, se ponen el zapato del otro, se ubican en la otra acera…
-Nos encontramos en una coyuntura de extrema polarización...
-La polarización se da porque los partidos del centro derecha y centro izquierda no supieron unirse y al final uno termina optando por lo “menos malo”.
-¿Por qué el Perú está polarizado?
-La polarización responde a nuestra falta de cultura. La cultura requiere de un segundo de reflexión, ¿qué es cultura?, cultura es la capacidad de ver la realidad y ponerte un momento al costado. Pero eso no pasa y en éste punto te soy sincero: no puedo votar por Humala.
-¿Por qué?
-Por sus antecedentes golpistas. ¡El es un militar!
-¿Votará?
-¡Por supuesto! ¡Pero no por Humala!
¿Qué es lo que le impide votar por Humala?
-¡Un militar no puede ser presidente! Los militares llevan en si un background, una vida que obedece al mando y no al gobierno. Los militares mandan no gobiernan. Los militares, obedecen órdenes, no reflexionan sobre un mandato. Con un nuevo parlamente, mi pregunta es: ¿cómo va a gobernar un militar? En la historia política del Perú, los militares que pasaron por el poder hundieron el Estado.
No existe comunión entre Estado y Cultura
-¿Somos un país huérfano en términos de promoción cultural?
-A estas alturas del tiempo y lo vivido entendí que los políticos no saben lo que es cultura. En el Perú no existe una comunión entre Estado y Cultura. Tenemos un sentimiento de orfandad que en algún momento lo expresó maravillosamente César Vallejo en su obra.
-¿Qué opina del proyecto de Luciana León?
-El proyecto de Luciana León es mucho más importante que la creación del Ministerio de cultura. La creación del Ministerio de Cultura ha opacado el proyecto de Luciana y otros temas más que ayudan a fomentar nuestras disciplinas artísticas. La población tiene derecho a la cultura. Los pueblos jóvenes deben tener sus salas de teatros, de cines, su centro cultural…en fin. Nadie hace nada al respecto.
Festival de Cine de Lima
-¿Qué sorpresas nos tiene a propósito de los 15 años del Festival de Cine de Lima?
-Aquí en Lima se entregará el premio a La mejor película latinoamericana; vienen 18 productores para recibir proyectos de nuestros jóvenes cineastas. Vamos a tener un taller en set para producir películas en 3D y tendremos como presidenta del jurado a Geraldine Chaplin.
-¿Cómo la convenció?
- Soy muy amigo de Geraldine.
-¿Cómo surgió la amistad?
-A propósito de mi amistad con Carlos Saura con quien trabajé en cine durante mi estadía en España. Compartí mucho con ambos incluso viví una temporada con ellos.
-¿Cristalizará por fin la realización de su película?
-¡Claro que sí! El guión ya está. Es una adaptación del libro “Amores de invierno” de Alonso Cueto.
