“La obra recrea el enfrentamiento de dos culturas disímiles, dos maneras de ver el mundo”, dice el director teatral
Teatro de la Resistencia (TDLR) estrena esta noche Atahuallpa: segunda fase, puesta en escena que recrea la mirada española sobre los hechos acontecidos en una Cajamarca de 1532. La obra cuenta con las actuaciones de Pedro del Castillo, Cynthia Schreiber y Daniel Zarauz, bajo la dirección de Beto Romero quien en las siguientes líneas nos habla al respecto.
-Hoy se estrena Atahuallpa, un montaje elaborado desde una óptica hispana, ¿Por qué?
-En la obra contamos la mirada hispana del desencuentro entre Pizarro y Atahuallpa. Hacemos una relectura de la histórica y fatídica tarde entre ambos y todo lo que representó ésa coyuntura.
-¿Coyuntura de conflictos?
-Una serie de hechos como el enfrentamiento de dos culturas disímiles, dos cosmovisiones diferentes, dos maneras de ver el mundo, dos idiomas heterogéneos. El encuentro como tal no fue posible y el símbolo más latente sobre este tema es la historia que se ha tejido alrededor de la biblia que tira Atahuallpa.
-El concepto de la puesta, ¿tiene puntos críticos?
-¡Por supuesto! Uno de los puntos álgidos en este montaje es la misma captura de Atahuallpa. ¿Cómo tan pocos hombres pudieron con tantos guerreros? Este punto no se cuenta en la historia oficial y nosotros como grupo de teatro de documento si lo hacemos argumentándonos en el texto de las crónicas españoles a las cuales hemos apelado para recrear la dramaturgia de la pieza. El segundo momento, es el juicio a Atahuallpa; la confrontación de dos visiones y la posición de los españoles ¿Por qué realmente lo asesinaron?
-Hoy se estrena Atahuallpa, un montaje elaborado desde una óptica hispana, ¿Por qué?
-En la obra contamos la mirada hispana del desencuentro entre Pizarro y Atahuallpa. Hacemos una relectura de la histórica y fatídica tarde entre ambos y todo lo que representó ésa coyuntura.
-¿Coyuntura de conflictos?
-Una serie de hechos como el enfrentamiento de dos culturas disímiles, dos cosmovisiones diferentes, dos maneras de ver el mundo, dos idiomas heterogéneos. El encuentro como tal no fue posible y el símbolo más latente sobre este tema es la historia que se ha tejido alrededor de la biblia que tira Atahuallpa.
-El concepto de la puesta, ¿tiene puntos críticos?
-¡Por supuesto! Uno de los puntos álgidos en este montaje es la misma captura de Atahuallpa. ¿Cómo tan pocos hombres pudieron con tantos guerreros? Este punto no se cuenta en la historia oficial y nosotros como grupo de teatro de documento si lo hacemos argumentándonos en el texto de las crónicas españoles a las cuales hemos apelado para recrear la dramaturgia de la pieza. El segundo momento, es el juicio a Atahuallpa; la confrontación de dos visiones y la posición de los españoles ¿Por qué realmente lo asesinaron?
-¿Qué autores forman parte de esta dramaturgia?
- Crónicas españoles como Pedro Sánchez de la Hoz, Francisco de Jerez, Pedro Pizarro. La dramaturgia es muy parecida al primer montaje que la desarrollamos en “momentos” y no como historia convencional que tiene un principio y un fin. Lo que construimos son momentos en donde damos a conocer cómo era la mentalidad de los españoles de aquella época.
-¿Una España incipiente?
-¡Claro! Una España que salía de 400 años de ocupación, en pleno proceso de formación; con un idioma que recién surgía en Europa en ese momento.
-Según algunos historiadores los españoles que vinieron a colonizarnos eran grupos de delincuentes ¿no?
-Es otro de los mitos que estamos desenmarañando ¿no? Ninguno de los viajes de conquista de Pizarro fue financiado por la Corona Española, ellos tenían que financiar sus viajes de conquista con sus propias armas, sus propias embarcaciones.
-¿Invasores económicamente sólidos?
-Eran una especie de aventureros de la época que venían dispuestos a hacerse millonarios. De Pizarro se decía que era un “chanchero” que vino a conquistarnos pero el crió chanchos hasta los 10 años y cuando llegó tenía sobre los 50 años y había pasado más de 40 años en el ejército. Cuando él hace la famosa sociedad con Almagro y Luque eran los tres hombres más ricos de todo Panamá.
- Crónicas españoles como Pedro Sánchez de la Hoz, Francisco de Jerez, Pedro Pizarro. La dramaturgia es muy parecida al primer montaje que la desarrollamos en “momentos” y no como historia convencional que tiene un principio y un fin. Lo que construimos son momentos en donde damos a conocer cómo era la mentalidad de los españoles de aquella época.
-¿Una España incipiente?
-¡Claro! Una España que salía de 400 años de ocupación, en pleno proceso de formación; con un idioma que recién surgía en Europa en ese momento.
-Según algunos historiadores los españoles que vinieron a colonizarnos eran grupos de delincuentes ¿no?
-Es otro de los mitos que estamos desenmarañando ¿no? Ninguno de los viajes de conquista de Pizarro fue financiado por la Corona Española, ellos tenían que financiar sus viajes de conquista con sus propias armas, sus propias embarcaciones.
-¿Invasores económicamente sólidos?
-Eran una especie de aventureros de la época que venían dispuestos a hacerse millonarios. De Pizarro se decía que era un “chanchero” que vino a conquistarnos pero el crió chanchos hasta los 10 años y cuando llegó tenía sobre los 50 años y había pasado más de 40 años en el ejército. Cuando él hace la famosa sociedad con Almagro y Luque eran los tres hombres más ricos de todo Panamá.
-¿Cuáles son los contrastes entre el primer montaje de Atahuallpa y el de ahora?
-El contraste más fuerte es Pizarro quien en esta pieza es el personaje principal. Atahuallpa: la segunda fase, nuestro estreno de hoy es la contraparte de lo que fue la primera parte. En la primera puesta en escena el motor fue Atahuallpa y en este nuevo estreno Pizarro es el protagónico. El personaje más visible y fuerte es el conquistador y alrededor de su persona su pensamiento y sus temores. Estamos planteando una realidad tal como fue.
-¿Qué nos puede decir de Pizarro?
-Pizarro fue hijo ilegítimo, no reconocido, nunca pudo aspirar a un cargo nobiliario y la única opción que le quedaba para acceder al poder era tener dinero. Incluso en el tercer viaje cuando se dirige a hablar con el Rey, éste no lo recibe y manda a una tercera persona para que converse con él. Ese es el estigma de Pizarro. Para ser alguien tuvo que venir a este continente fomentar la guerra, matar y convertirse en alguien ¿no?
- ¿Cuál es el punto de reflexión en este Atahuallpa de visión hispana?
-¡El teatro no da soluciones! El teatro genera interrogantes para que nos motive a la reflexión.
-El contraste más fuerte es Pizarro quien en esta pieza es el personaje principal. Atahuallpa: la segunda fase, nuestro estreno de hoy es la contraparte de lo que fue la primera parte. En la primera puesta en escena el motor fue Atahuallpa y en este nuevo estreno Pizarro es el protagónico. El personaje más visible y fuerte es el conquistador y alrededor de su persona su pensamiento y sus temores. Estamos planteando una realidad tal como fue.
-¿Qué nos puede decir de Pizarro?
-Pizarro fue hijo ilegítimo, no reconocido, nunca pudo aspirar a un cargo nobiliario y la única opción que le quedaba para acceder al poder era tener dinero. Incluso en el tercer viaje cuando se dirige a hablar con el Rey, éste no lo recibe y manda a una tercera persona para que converse con él. Ese es el estigma de Pizarro. Para ser alguien tuvo que venir a este continente fomentar la guerra, matar y convertirse en alguien ¿no?
- ¿Cuál es el punto de reflexión en este Atahuallpa de visión hispana?
-¡El teatro no da soluciones! El teatro genera interrogantes para que nos motive a la reflexión.