Comentario sobre el libro El efecto del espejo, documento sobre la exposición del mismo nombre que reúne óleos sobre lienzo, dibujos y fotografías que exploran la vida sexual del artista
Escribe: Luis Paredes
Juan Diego Vergara, ha elegido el
camino de exponer su vida íntima y ello conlleva una vía que pocos artistas se
atreven a transitar. El motivo estético es él mismo. Su opción sexual. Su
mundo. Sus relaciones. Todo aquello que circunda el hecho de ser homosexual en
París. Aunque conlleve una franqueza que rompa los límites de la sinceridad;
pero con una franca intención de epater les bourgois…Intención que no invalida
su arte, antes lo dota de una rebeldía que lo emparenta con las grandes gestas
ante la hipocresía y dobles del presente.
Los instrumentos para este desnudarse
son propios de los artefactos que ha ido experimentando a lo largo de su
permanente búsqueda estética donde los distintos formatos comunicacionales lo
atraen para formular una crítica al lenguaje que establece la publicidad y lo
llamable star-system.
La provocación que establece con sus
productos visuales es muy fuerte y siempre lo hace considerando espacios
propios, situaciones íntimas, relaciones que involucran a un mundo que pugna
por evadir el sistema de convenciones establecidas. Esta lucha no
es solitaria porque en otros planos del arte y la vida social, incluso en
París, también se manifiestan con la misma contundencia y a veces con los
mismos propósitos.
Las distintas formas de amor, aparecen
en las imágenes sugestivas del artista, con el añadido de que formula algo
que está en el ambiente; que todas las formas de amar son válidas y que muchas
veces el amor entra en conflicto con la parte más atávica de la sociedad que
quiere tapar el sol con un dedo.
La apuesta de Juan Diego Vergara tiene el
súper- objetivo de despertar la conciencia de su espectador hacia lo que se ve
como oscuro, dark, prohibido, pero que poco a poco forma parte de una igualdad
que ya se postula en el orden presente.
